El empresario Antonio Aracre desembarcó en Casa Rosada y asumirá como jefe de asesores en el Gabinete

El ex CEO de Syngenta tomará formalmente el cargo el 1° de febrero. Anticipó que “buscará acercar el mundo privado al sector público”. Hoy se reunió con Alberto Fernández.

El ex CEO de la empresa multinacional Syngenta, Antonio Aracre, oficializó hoy su desembarco en el Gobierno como jefe de asesores del presidente Alberto Fernández, con el objetivo de “acercar el mundo privado al sector público”, dijo en sus primeras declaraciones públicas.

El futuro funcionario nacional asumirá formalmente su puesto el 1° de febrero, fecha a partir de la cual tendrá como “misión principal ayudar en todos los temas en que el Presidente necesite información”, anticipó en un hilo de su cuenta personal de Twitter.

En octubre pasado, Aracre anunció su incursión a la política tras renunciar al máximo cargo ejecutivo para América Latina de Syngenta, una empresa líder en la agroindustria. La firma, de origen suizo y capitales chinos, tiene como principal negocio la producción y comercialización de insumos como agroquímicos y semillas, y con una importante trayectoria y presencia en el mercado en lo relacionado a la protección de cultivos.

En los últimos meses, el reconocido empresario visitó varias veces la Quinta de Olivos, donde se reunió con el presidente Alberto Fernández, y también los despachos de Economía, donde visitó tanto a Martín Guzmán como a Sergio Massa.

Ahora, el ex CEO de Syngenta asumirá el cargo de jefe de Asesores del Gabinete de la Nación en reemplazo de Julián Leunda, que renunció a principios de diciembre luego de quedar envuelto en una polémica por ser mencionado en un supuesto chat de jueces, funcionarios porteños y empresarios que hicieron un viaje conjunto a la estancia del magnate Joe Lewis en Lago Escondido, provincia de Río Negro.

En su primera declaración sobre su irrupción a la gestión pública, Antonio Aracre explicó que particularmente le interesa “trabajar en acercar el mundo privado, de las inversiones, al sector público para capitalizar y potenciar las oportunidades que hay en los próximos tres a cinco años”.

También señaló que apuntará a sentar en una mesa al “Gobierno, oposición, el mundo del trabajo y los sindicatos y poder acordar tres o cuatro puntos importantes que le permitan a los argentinos recuperar la esperanza de que la política puede conversar sobre los temas que le pueden cambiar la vida”, expresó en sus redes sociales

En relación a los temas aspira a plantear en esa ronda de negociaciones, el futuro jefe de asesores presidenciales anticipó que serán “un Estado más eficiente y menos burocrático y una reforma tributaria”. “Tratar de acercarse a la oposición o los sindicatos desde los temas que nos separan no sería una buena idea, hay que hacerlo desde los temas en que se puede encontrar algún consenso”, concluyó Aracre.

Los últimos años de Aracre en Syngenta

En diciembre de 2020, durante un acto realizado en la ciudad santafesina de Venado Tuerto y con la presencia de Alberto Fernández, el entonces CEO de Syngenta anunció la exportación de soja a China. Se trataba del lanzamiento de Agri Value Chain (Cadena Integrada de Valor en Agro), que es una iniciativa conjunta con la empresa estatal china Sinograin Oils Corporation donde ambas compañías garantizan la venta al gigante asiático de 1,2 millones de toneladas de soja, por un monto superior a los 500 millones de dólares.

En julio pasado, Aracre volvió a ser noticia al compartir una foto con Martín Guzmán, después de haber renunciado al cargo de ministro de Economía. En ese momento, el empresario dijo: “Al igual que cuando era ministro, hoy seguimos conversando con Martín Guzmán sobre la necesidad de construir consensos para una Argentina más fuerte, con menos desigualdad y con más oportunidades para seguir creciendo”, escribió el ejecutivo.

Acerca de su pensamiento económico, el futuro jefe de asesores definió: “Hasta las elecciones, el Gobierno tiene que dar un shock antiinflacionario y eliminar esta indexación que nos está matando. Hace falta cordura”.

El vínculo con el Gobierno tuvo su costo con el sector agropecuario. Algunos referentes de la producción y sociedades rurales del norte bonaerense cuestionaron la figura de Aracre por el apoyo que había hecho el CEO a medidas que impulsó el Gobierno hacia el campo, en medio de la tensión entre el Poder Ejecutivo y las organizaciones representativas de la actividad agropecuaria.

Pese a mostrars su cercanía con el oficialismo, Aracre no descartó tras su renuncia en Syngenta trabajar con dirigentes de Juntos por el Cambio. “Si me llama Alberto o el año que viene Larreta, estoy”, dijo en una declaración reciente.